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3.- Sexo, hormonas y SIDA

Las diferencias raciales existen en el comportamiento sexual. Las razas difieren en cuan a menudo les gusta tener relaciones sexuales. Esto afecta los índices de enfermedades de transmisión sexual. Para todos los efectos, los Orientales son los menos activos sexualmente, los Negros los más, y los Blancos entremedio. Las razas también difieren en el número de mellizos y nacimientos múltiples, en niveles de hormonas, en actitudes sexuales e incluso en su anatomía sexual.

Las razas difieren en su nivel de hormonas sexuales. Los niveles de hormonas son los más altos entre los Negros y los más bajos entre los Orientales. Esto nos puede explicar porqué las mujeres Negras tienen tanto síndrome premenstrual (SPM) y las Orientales menos.

Las razas también difieren en nivel de testosterona, lo que ayuda a explicar el comportamiento de los hombres. En un estudio sobre estudiantes de colegio, los niveles de testosterona eran 10 a 20 % más elevados en los Negros que en los Blancos. Para una más antigua muestra de los veteranos del ejército de los EE.UU., los Negros tenían niveles un 3 % más altos que los Blancos (ver la edición de 1992 de "Esteroides"). En un estudio sobre estudiantes universitarios, los Negros norteamericanos tenían niveles 10 a 15 % más altos que los Blancos norteamericanos. Los Japoneses (en Japón) tenían niveles aún más inferiores.

La testosterona actúa como un "interruptor principal". Afecta cosas como el ego, la agresión, el altruismo, el crimen y la sexualidad, no solo para hombres sino también para las mujeres. La testosterona también controla cosas como la masa muscular y el cambio de tono en la voz en la edad adolescente.

Comportamiento sexual y actitudes

Los Negros son sexualmente activos a más temprana edad que los Blancos. Los Blancos, a su vez, son sexualmente activos más tempranamente que los Orientales. Las investigaciones de la Organización Mundial de la Salud demuestran que este patrón racial triple es verdadero alrededor del mundo. Las investigaciones nacionales en Gran Bretaña y los EE.UU. entregan los mismos resultados.

Un estudio en Los Angeles encontró que la edad para la primera actividad sexual entre estudiantes de educación secundaria era 16.4 años para los Orientales, 14.4 años para los Negros, con los Blancos a nivel intermedio. El porcentaje de estudiantes que eran sexualmente activos era 32 % para los Orientales, pero 81 % para los Negros. Los Blancos nuevamente caían entre las dos otras razas. Un estudio canadiense descubrió que los Orientales eran más reprimidos, incluso en las fantasías y la masturbación. Los Orientales nacidos en Canadá eran tan reprimidos como los inmigrantes Asiáticos recientes.

Alrededor del mundo, la actividad sexual de las parejas casadas sigue el triple patrón. Una investigación de 1951 le preguntó a la gente cuán a menudo tenían sexo. Los isleños del Pacífico y los Amerindios dijeron que de 1 a 4 veces por semana, los Blancos norteamericanos respondieron de 2 a 4 veces por semana, mientras que los Africanos respondieron que tenían sexo de 3 a 10 veces por semanas. Investigaciones posteriores han confirmado estos hallazgos. La frecuencia promedio para las relaciones por semana, para parejas casadas en sus 20's, es 2.5 para los Japoneses y Chinos en Asia. Es 4 para los Blancos norteamericanos. Para los Negros norteamericanos es 5.

Se encuentran diferencias raciales en la permisividad sexual, en el pensar sobre sexo e incluso en los niveles de culpabilidad sexual. En un estudio, tres generaciones de Japoneses norteamericanos y estudiantes Japoneses en Japón, tenían menos interés en el sexo que los estudiantes Europeos. Incluso, cada generación de Japoneses norteamericanos tenía más culpabilidad sexual que los Blancos norteamericanos de su edad. En otro estudio, los hombres y mujeres Británicos dijeron que tenían fantasías sexuales tres veces más que los hombres y mujeres Japoneses. Los Orientales eran los más proclives a decir que el sexo tenía un efecto debilitador. Los Negros dijeron que tenían más relaciones sexuales casuales y sentían menos preocupación sobre ellas que los Blancos.

Fisiología y anatomía sexual

Los promedios de ovulación difieren para las razas, como la frecuencia de mellizos. Las mujeres Negras tienden a tener ciclos más cortos que las mujeres Blancas. A menudo producen dos óvulos en un único ciclo. Esto las hace más fértiles.

El índice de mellizos de dos óvulos es menos de 4 por cada 1.000 nacimientos para los Orientales. Es de 8 para los Blancos, pero para los Negros es de 16 o más. Los trillizos y cuatrillizos son muy escasos en todos los grupos, pero muestran el mismo orden del triple patrón - los Negros tienen más, luego los Blancos, y los Orientales al final.

Desde el siglo VIII al XVI, la literatura Islámica Árabe mostraba a los Negros Africanos, hombres y mujeres, teniendo una elevada potencia sexual y órganos más grandes. Los antropólogos Europeos del siglo XIX informaron sobre la posición de los genitales femeninos (los Orientales más arriba, los Negros más abajo, los Blancos intermedio) y el ángulo de la erección masculina (los Orientales paralela al cuerpo, los Negros en ángulo recto). Aseguraban que las Orientales también tenían menos características sexuales secundarias (músculos visibles, nalgas y senos), y las Negras más. Otros antiguos antropólogos también reportaron que la gente de ancestro mestizo tendían a caer al medio.

¿Debiéramos tomar en serio estos informes de extranjeros sobre materias tan sensibles? Los datos modernos parecen confirmar estas antiguas observaciones. Alrededor del mundo, las agencias de salud pública dan ahora condones gratis para ayudar a detener la difusión del SIDA y ayudar a salvar vidas. La talla de los condones puede afectar la forma en que es usado, por lo que estas agencias toman nota de la talla del pene cuando entregan condones. Las directrices de la Organización Mundial de la Salud especifican un condón de 49 mm. de diámetro para Asia, uno de 52 mm. de diámetro para Norteamérica y Europa, y uno de 53 mm. de diámetro para Africa. China está ahora haciendo sus propios condones, 49 mm.

Las diferencias raciales en tamaño de testículos también han sido medidas (Asiáticos, 9 gramos; Europeos, 21 gramos). Esto no solo porque los Europeos tengan una talla corporal ligeramente mayor. Las diferencias son demasiado amplias. Un artículo de 1989 de "Nature", la principal revista científica británica, dijo que la diferencia en tamaño de testículos podría significar que los Blancos podían tener dos veces más esperma al día que los Orientales. Hasta el momento, no tenemos información sobre la talla relativa de los Negros.

SIDA y VIH

Las diferencias raciales en comportamiento sexual tienen resultados en la vida real. Ellas afectan los índices de enfermedades de transmisión sexual. La Organización Mundial de la Salud toma nota de las enfermedades sexuales como la sífilis, la gonorrea, el herpes y la clamidia. Reportan bajos niveles en China y Japón, y altos niveles en Africa. Los países Europeos están al medio.

El patrón racial de estas enfermedades es también cierto para los EE.UU. El índice de 1997 de sífilis entre los Negros era 24 veces el índice de los Blancos. El índice nacional de sífilis para los Negros era de 22 casos por 100.000 habitantes. Era de 0.5 por cada 100.000 habitantes para los Blancos, e incluso mucho menos para los Orientales. Un reciente reporte halló que sobre el 25 % de las jóvenes urbanas (principalmente Negras) tenían clamidia.

Las diferencias sexuales también aparecen en la actual crisis del SIDA. Más de 30 millones de personas alrededor del mundo están viviendo con VIH o SIDA. Muchos Negros en los EE.UU. se contagian con SIDA a través del uso de drogas intravenosas, pero lo adquieren más a través del sexo. En el otro extremo, la mayoría de los enfermos de SIDA en China y Japón son hemofílicos. Los países Europeos tienen índices de infección de VIH intermedios, la mayoría entre hombres homosexuales.

El cuadro 5 muestra las estimaciones anuales de los índices de infección de VIH, en varias partes del mundo de las Naciones Unidas. La epidemia comenzó en el Africa Negra, a finales de los 70's. Hoy, 23 millones de adultos viven con VIH/SIDA. Más del 50 % de estos son mujeres. Esto demuestra que la transmisión es principalmente heterosexual. Normalmente, 8 de cada 100 Africanos están infectados con el virus del SIDA y la epidemia está considerada fuera de control. En algunas áreas el SIDA alcanza el 70 %. En Sudáfrica, uno de cada 10 adultos vive con el VIH.

El índice de infección de VIH es también elevado en el Caribe Negro ¡Cerca del 2 %! Un 33 % de los casos de SIDA son mujeres. Esta elevada cifra entre las mujeres muestra que la difusión tiende a ser por medio de las relaciones heterosexuales. El elevado índice de VIH en el arco de 2.000 millas de países Caribeños, se extiende desde las Bermudas hasta la Guyana, y parece ser el más elevado en Haití, con un promedio cercano al 6 %. Es el área más infectada fuera del Africa Negra.

Cuadro 5
Indices de SIDA/VIH (%) para personas entre 15 a 49 años en 1999

Los datos publicados por los Centros para el Control y Prevención de las Enfermedades de los EE.UU., demuestran que los Africanos Americanos tienen índices de VIH similares a los Caribeños Negros y partes del Africa Negra. Un 3 % de los hombres Negros y un 1 % de las mujeres Negras en los EE.UU. viven con VIH (ver cuadro 5). El índice para los Blancos norteamericanos es menos de un 0.1 %, mientras que el índice para los Asiáticos norteamericanos es menos de 0.05 %. Los índices para Europa y el borde Pacífico son también bajos.

Por supuesto que el SIDA es un serio problema de salud pública para todos los grupos raciales, pero es especialmente serio para los Africanos y las personas de ancestro Africano.

Conclusión

El triple patrón de diferencias raciales se encuentra en los índices de nacimientos múltiples (mellizos de dos óvulos), niveles de hormonas, actitudes sexuales, anatomía sexual, frecuencia de relaciones y enfermedades de transmisión sexual (ETS). Los niveles de hormonas sexuales, para hombres y mujeres, son los más altos entre los Negros, los más bajos entre los Orientales, con los Blancos en el medio.

Las hormonas sexuales afectan no solo nuestros cuerpos, sino también el modo en que actuamos y pensamos. Los Negros son los más activos sexualmente, tienen más nacimientos múltiples y tienen las actitudes más permisivas. Los Orientales son los menos activos sexualmente y tienen menos fantasías sexuales y más culpabilidad sexual. Los Blancos se encuentran al medio.

Las enfermedades sexuales son más comunes en los Negros, y menos entre los Orientales, con los Blancos entremedio de los dos. El elevado índice de SIDA en Africa, el Caribe Negro y los Negros norteamericanos es alarmante.

Lecturas adicionales

Ellis, L., & Nyborg, H. (1992). Racial/ethnic variations in male testosterone levels: A probable contributor to group differences in health. Steroids, 57, 72-75.

UNAIDS (1999). AIDS epidemic update: December 1999. United Nations Program on HIV/AIDS. New York.